En un comunicado, la organización católica subraya que las Cáritas española y alemana son las que más fondos han recaudado de toda la Unión Europea y señala que a nivel internacional se han superado ya los 45 millones de euros.

En el terreno, más de 5.000 voluntarios de las respectivas Cáritas nacionales de los países afectados trabajan día a día en los planes de emergencia puestos en marcha para atender a los damnificados.

La acción se centra en asegurar a los damnificados cuatro aspectos básicos: distribución de alimentos y acceso al agua potable, medidas de profilaxis y prevención sanitaria para evitar la propagación de enfermedades respiratorias y disenterías, albergue temporal y ropa de abrigo a las personas que han perdido sus hogares y asistencia médica de urgencia a los heridos.