Así lo indicó Casado durante la clausura del mitin central de campaña en Palencia para las elecciones del 13 de febrero, donde acompañó al presidente de Castilla y León y candidato del PP a la reelección, Alfonso Fernández Mañueco, y al que asistieron el vicesecretario de Comunicación de este partido, Pablo Montesinos, y el portavoz del PP en el Senado, Javier Maroto.

Durante su intervención, afeó a Zapatero que haya “osado” hablar del PP en un acto de campaña del PSOE y que diga que los populares son “especialistas en meterse goles en propia meta”, cuando él es el “socio de negocios de un dictador” y de un “tirano”, refiriéndose a Maduro. “Señor Zapatero, váyase a Venezuela ya, hombre”, apuntó, al tiempo que dijo “qué personaje más nefasto”.

Asimismo, señaló que Sánchez es el “duque del Falcon”, que acude a Castilla y León en helicóptero y en avión, que “contamina más que miles de coches”. El líder del PP puntualizó que ni Zapatero ni Sánchez “van a venir aquí a hablar de ningún tipo de regeneración ni de ningún tipo de futuro para esta tierra”, lo que quiere es que “dejen de maltratar” esta comunidad.

Casado inició su discurso recordando que está orgulloso de ser palentino y no “palenciano”, dirigiéndose al Gobierno, a quien afeó que no conozca el gentilicio de los ciudadanos de Palencia y “viene aquí de visita y de turismo electoral”. “Esta tierra merece la pena, estoy orgulloso de ser de aquí y voy a pelear por esta tierra”, apuntó.

“Es el momento de que todos estemos a la altura de la responsabilidad”, dijo. Según Casado, el resultado del 13 de febrero afectará a lo que el PP quiere trasladar en España, que es que ya están “hartos” de “negociaciones, de chantajes y de presiones en cada votación”, de “trampas” y de que el Gobierno esté “subastando cada voto y cada esfuerzo”.

ATAQUES DEL GOBIERNO

Durante su discurso, Casado criticó que el Gobierno haya “atacado” a la PAC, a la remolacha, a los agricultores y a la ganadería. Por ello, aseguró que cuando él llegue a La Moncloa apostará por la agricultura, por la ganadería y volverá a autorizar la caza del lobo en el norte del Duero. “Dejaremos que el sector tire adelante”, matizó.

También afeó que esté “atacando” las telecomunicaciones, que pretenda poner peajes en las autovías y las autopistas con la Ley de Movilidad, así como que “ataque” la industria. Al respecto, acusó al Gobierno de querer que sean “dependientes de sus subvenciones” y “empobrecer a una tierra para hacer una economía subsidiada”. “No hay derecho a que se demonice todo lo que no depende del BOE”, aseveró.

Bajo su criterio, al Gobierno lo que le gusta es “arruinarnos” para que “tengamos que depender de su paguita, esa paguilla con la que humilla a los pensionistas en mítines de partido”. “Esa es la izquierda, ruinosa, sectaria que hay que parar el 13 de febrero”, alentó.

Ante esta situación, Casado destacó que Mañueco es un “buen presidente” que “sabe que hay que hacer” y se burló al hablar de lo que tiene “en contra” porque “es una vergüenza”.

ELECCIONES

Antes de terminar su discurso, Casado resaltó que las elecciones del 13 de febrero pueden ser un “punto importante para ir desenmascarando a Sánchez”, al tiempo que hizo hincapié en que el PP es un partido “de Estado y de Gobierno”, es el partido “del sí” y no del “no es no”, del “sí” a las familias, a los autónomos, a las empresas, y a la juventud con futuro, entre otros.

Del “sí” a Castilla y León, continuó, también a Mañueco y a una España que “merece la pena”, a “recuperar por fin nuestro futuro al margen del socialismo y el radicalismo”. “Todos a ganar, a darlo todo y a recuperar el destino que nadie nos puede robar”, concluyó.