Sector financiero

CCOO señala que España es el país de la UE con mayor deterioro laboral y social en el sector bancario desde 2008

-Con más de 115.000 puestos de trabajo menos y 23.674 oficinas menos

MADRID
SERVIMEDIA

CCOO denunció este martes que España es el país de la UE en el que se ha producido desde 2008 un mayor deterioro laboral en el sector bancario, con más de 115.000 puestos de trabajo menos y una reducción de 23.674 oficinas, que se traduce también en un deterioro de la labor social del sector.

Así se refleja en el informe ‘Plantillas del sector financiero: imprescindibles. De persona a persona’, presentado este martes por la federación de servicios del sindicato, en el que repasa el proceso de concentración y reestructuración desarrollado por el sector financiero en España desde 2008 y las consecuencias que éste conlleva, tanto a nivel laboral para los trabajadores del sector, como a nivel social, teniendo en cuenta la importancia de su función para la población y el deterioro de la atención.

El informe recuerda que el proceso de reestructuración ha supuesto que 88 entidades financieras hayan confluido para dar lugar a solo diez grupos bancarios, que han pasado de contar con 276.497 trabajadores en 2008 a alrededor de 160.000 -más de 115.000 puestos de trabajo netos menos- tras acometer una reducción de 23.674 oficinas cuando, sin embargo, la población de España ha aumentado en más de un millón de personas en el mismo periodo.

Así, el informe señala que España es el país de la UE “con mayor devaluación” del fin social de la banca, al duplicar el porcentaje de reducción de plantilla del sector financiero europeo (un -38% en España, frente al -19,61% en Europa).

De esta forma, la “carga de atención” ha pasado de 167,2 habitantes por trabajador del sector en 2008 a los 276,1 habitantes por trabajador en 2020, por encima de los 186,5 de la eurozona, pasando de 46.065 oficinas en 2008 a 22.392 en 2020 (-51%), frente al -38% de la eurozona. Con estos datos, España ha pasado de tener diez oficinas por cada 10.000 habitantes en 2008 a 4,7 en 2020.

CCOO también advierte sobre la alta concentración en el sector, al incrementarse la cuota de mercado de las cinco mayores entidades desde el 42,4% de 2008 hasta un 66,4% en 2020, dando lugar a que España sea, solo superada por Grecia y Chipre, “el país de la UE que más ha reducido desde 2008 su ‘Ratio Potencial de Otorgamiento de Crédito’”, indicador que combina los índices de ‘bancarización’ (plantilla bancaria por 10.000 habitantes), ‘proximidad’ (sucursales por 10.000 habitantes) y ‘competencia’ (porcentaje de activos no concentrados en las cinco mayores entidades”.

Respecto a 2021, el informe apunta que el pasado ejercicio “ha traído los procesos de regulación de empleo más intensos de la historia” en el sector, con la salida de más de 18.000 trabajadores -Banco Santander (3.572), CaixaBank (6.452), BBVA (2.935), Banco Sabadell (1.605+1.800) y Unicaja (1.513)-, aunque también indica que “se empiezan a observar ciertas tasas de reposición, con unas 1.300 entradas de nuevo personal en el mismo periodo y el anuncio de nuevas contrataciones”.

El informe de CCOO también señala un cambio en el perfil de los trabajadores del sector, pasando de tener en 2008 una proporción del 60% de hombres y un 40% de mujeres, a contar en la actualidad en las plantillas con una media del 51% a favor de las mujeres. Sin embargo, la presencia de mujeres en los equipos de alta dirección de las grandes entidades es minoritario, al representar en torno al 20%.

“MODELO LABORAL INSOSTENIBLE”

Por todo ello, para CCOO, “es el momento de reivindicar la función social y el papel clave que debe jugar el sector financiero en el sistema económico” y “de reivindicar un sector financiero social y laboralmente responsable, que priorice su dimensión social y el aumento de su potencial de otorgamiento de crédito”.

Asimismo, añadió que “es el momento de reivindicar un sector financiero que cuide a sus plantillas, el activo imprescindible de un sector que, más allá de la digitalización, los beneficios récord y las desmesuradas retribuciones de sus cúpulas, se sigue basando en personas que atienden a personas”.

En esta línea, CCOO considera que los trabajadores del sector bancario son “imprescindibles” para garantizar la cobertura de las necesidades financieras de familias y empresas, así como “el mayor activo del sector financiero”.

Así, advierte que el sector tiene “un modelo de negocio laboralmente insostenible que debe cesar de inmediato” y que, pese a que las entidades han achacado a los procesos de digitalización parte del ajuste de plantilla realizado desde 2008, éstos han incrementado “exponencialmente” la sobrecarga de trabajo de las plantillas, a lo que se suman, “prolongaciones de jornada, objetivos comerciales inasumibles y presiones desmedidas” que llevan “a una situación límite para plantillas estresadas, quemadas y desmotivadas”.

Además, CCOO denuncia que al mismo tiempo que “las cúpulas del sector descuidan e ignoran a las plantillas” con el proceso de reestructuración, en el sector ha habido “remuneraciones socialmente indecentes”, elevando sus retribuciones “de forma exponencial”, con aumento de los beneficios de las principales entidades en un 34,17% entre 2018 y 2021 y un aumento de los sueldos de los presidentes y consejeros delegados en un 37,77%.

INCLUSIÓN FINANCIERA

El sindicato también se refiere en su informe al problema de inclusión financiera generado por la digitalización del sector y apunta que la incidencia territorial del proceso ha sido especialmente importante en Cataluña, Castilla y León, Galicia y Asturias. Asimismo, subraya que ya hay 4.500 municipios, que representan al 3,5% de la población, sin ninguna sucursal bancaria, con un especial aumento de la carga de atención para las plantillas del sector en Cataluña, Madrid, Aragón, Extremadura y Castilla La Mancha.

A este respecto, CCOO critica que el reciente protocolo elaborado por las patronales del sector para responder a la presión social ejercida por colectivos como las personas mayores, debido a su mayor necesidad de contar con atención presencial, “más allá de garantizar la inclusión financiera, se limita a un lavado de cara cortoplacista si no se dota de recursos en forma de plantilla”.

En este sentido, el sindicato denuncia que “no es admisible que las direcciones bancarias sigan utilizando a sus profesionales como ‘escudos humanos’ que soportan las consecuencias de sus decisiones empresariales”, y asegura que los trabajadores del sector “somos personas que queremos seguir atendiendo personas”, por lo que exigen “más plantilla para poder atender a la clientela, menos presiones comerciales para dar más atención personalizada y que la digitalización sea una opción, no una obligación”.

(SERVIMEDIA)
19 Abr 2022
IPS/gja