El plazo para la trasposición a la legislación nacional de esta directiva finaliza hoy, aunque se permita un plazo adicional de gracia de tres años, según afirma CEOMA en un comunicado.

El presidente de CEOMA, Eduardo Rodríguez Rovira, reclamó a las autoridades que "no agoten dicho plazo, porque la discriminación por edad o discapacidad pondría en peligro la consecución d los objetivos del Tratado CE, en particular el logro de un alto nivel de empleo y de protección social, la elevación del nivel y de calidad de vida, la cohesión económica y social, de solidaridad y la libre circulación de personas, según recoge el propio considerando 11 de la Directiva".

La Directiva 2000/78 completa la protección ya otorgada al principio de igualdad de trato entre hombres y mujeres, y a la no discriminación por razón de origen racial o étnico y comprende los casos de discriminación n el empleo por motivos de religión o convicciones, discapacidad, edad u orientación sexual.