En el acto, uno de los de carácter sectorial que Díaz ha celebrado dentro de su llamado proceso de escucha, Moral señaló que el sistema sanitario muchas veces “no es accesible”, ni sus centros ni las farmacias, y que la citada “irrelevancia de la discapacidad” requiere “repensar el sistema”.

El presidente del Cermi Comunidad de Madrid diagnosticó que “el modelo de gobernanza es bastante deficiente” y que los usuarios son “meros receptores pasivos”. A su modo de ver, este “déficit de gobernanza podría subsanarse con una participación más activa”, de forma que los colectivos sociales, en su caso el Cermi, pudieran hacer aportaciones propositivas en el análisis y el balance del sistema.

Apuntó que el sistema sanitario “mejoraría si fuera más abierto, más inclusivo” y, en particular, si tuviera en cuenta la diversidad del colectivo de la discapacidad, del que advirtió de que tiene muchas tipologías distintas a la silla de ruedas y no se tienen en cuenta.

Finalmente, quiso poner el acento en la vertiente de género porque los cuidados recaen casi exclusivamente en mujeres, y ese factor también “debe tenerse en cuenta” para que el sistema “haga que todos nos sintamos representados”. Por el momento, sentenció, “la discapacidad no lo está”.