Este hecho, unido a la difusión por parte de la prensa de dos documentos del CESID y a las declaracines efectuadas a los medios de comunicación por Perote, son los argumentos utilizados por el juez Palomino en el auto para acordar el ingreso en prisión del coronel.

En concreto, el magistrado señala que de acuerdo con las actuaciones, Perote "retuvo en su poder un mínimo de nueve documentos de cuyo paradero no ha dado explicacionea" ni los entregó al juzgado a pesar de los requerimientos de éste.

Asimismo, el juez argumenta la orden de ingreso en prisión de Perote diciendo que dos documentos delCESID difundidos por El Mundo, 'el acta fundacional de los GAL', entregada por Ricardo García Damborenea al juez Baltasar Garzón y la nota interior sobre la muerte de la etarra Lucía Urigoitia estaban contenidos en las microfichas que Perote se llevó cuando abandonó el Centro de Información en 1991, material que, según el juez, el coronel "conservó en su poder al margen del control del Centro y de cualquier licencia o autorización".

Además achaca a Perote haber hecho declaraciones a diversos medios decomunicación, "pese a encontrarse en situación de prisión atenuada" lo que, en opinión del juez Palomino "ha hecho pervivir la alarma social que aparentaba reducida hasta este momento".

Por todo ello, el magistrado acuerda de nuevo el ingreso en prisión provisional comunicada de Perote y ordena su traslado a la cárcel militar de Alcalá de Henares, lo que se ha cumplido a primeras horas de la tarde.