Según informó el organismo este miércoles, a solicitud del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, la CNMC ha realizado la prueba de equilibrio económico de acuerdo con la metodología aprobada el 16 de julio de 2020, en la que concluyó los servicios que son sustituibles con la entrada en la ruta Madrid-Segovia-Valladolid de la compañía ferroviaria francesa.

En concreto, la comisión resaltó que los no sustituibles son los servicios públicos de media distancia convencional, debido al tiempo de viaje, muy inferior en la alta velocidad.

En cuanto a los sustituibles, la CNMC destacó que los servicios Avant (servicios públicos de media distancia en alta velocidad) sí que son sustituibles por los nuevos servicios propuestos por Ouigo por sus características técnicas, aunque matizó que los Avant serían más competitivos que los de Ouigo, al tener mejores precios (en los bonos multiviaje), más frecuencias y la posibilidad de cambiar fecha y horario del viaje de forma gratuita.

Así, la CNMC consideró que únicamente podrán afectar al contrato de servicio público los servicios Avant que utilizan los viajeros ocasionales, que circulan hasta 35 minutos antes o 35 minutos después de los servicios de Ouigo. De acuerdo con este análisis, solo seis circulaciones al día de los servicios Avant (de un total de 33) resultarían afectadas.

Asimismo, la comisión recomendó que, como ya se indicó cuando se analizó la ruta Madrid-Albacete, se revise de nuevo el alcance de los servicios públicos entre Madrid y Valladolid, y que estos cubran solamente los bonos multiviaje para viajeros frecuentes, ya que para los viajeros ocasionales los servicios comerciales son más baratos que los públicos y tienen suficientes frecuencias.