Inicialmente este nuevo cuerpo tan solo cuenta con un agente en Huelva, aunque no se descarta que próximamente puedan sumarse otras personas a esta labor de vigilancia.

Según explicó la delegada municipal de Infraestructura Urbana y Servicios del Ayuntamiento de Huelva, Amalia Perianes, el "policía ecológico" es un inspector de medio ambiente transformado en agente de la ley y cuya misión fundamental es conseguir qe los vecinos mantengan limpias las calles.

La concejala destacó la paradoja que supone que mientras un elevado porcentaje de onubenses han acogido de forma satisfactoria la iniciativa de recogida selectiva de papel, pilas o vidrio, al mismo tiempo cada vez son más las personas que no respetan las mínimas normas de limpieza callejera.

Aunque las sanciones que imponga este policía no sobrepasarán normalmente las 15.000 pesetas, el agente está facultado para multar con cantidades más elevadas en caos más graves.