Un grupo francés de supermercados ha retirado de la venta diferentes marcas de productos de alimentación y perfumería por considerar que han subido demasiado sus precios en los últimos meses.

A este respecto, la presidenta de la Confederación Española de Organizaciones de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios (Ceaccu), Isabel Ávila, consideró que una medida como esta "no es adecuada, ni en Francia, ni en España ni en ningún país".

Ávila declaró hoy a Servimedia que "el control de los precios es competencia del Ejecutivo" y que, si existe la libertad de empresa, también existe la de opción de compra.

"El consumidor ha de ser libre para valorar si un producto es caro o no, si quiere comprarlo, o no", añadió.

Por su parte, la portavoz de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), Ileana Izveeniceanu, se manifestó hoy en contra de la medida de este supermercado que, no obstante, reconoció que "muy libre de seguir la política de comercio que elija".

La portavoz de OCU abogó por la competencia y la libertad de mercado, para que el consumidor escoja lo que más le conviene y lo que prefiere comprar.

"Hay consumidores a quienes les compensa gastar el dinero en un producto caro. Tienen derecho a elegir lo que les convenga por su calidad-precio". Además, "esas marcas, si no pueden vender en esos supermercados, utilizarán otros cauces, como las tiendas selectas".

A su juicio, el intervencionismo, el boicot y la criminalización de una serie de productos no es la mejor manera para que bajen los pecios.