Los parlamentarios populares admiten que Aznar llevó a cabo un discurso "sobrio" y "muy preparado" en su primera intervención, al contrario de Rodríguez Zapatero, pero no estuvo a la altura de las circunstancias en las respuestas al principal líder de la oposición.

Los diputados del PP con los que ha hablado Servimedia consideran que este debate ha sido la consolidación definitiva de Zapatero al frente de su partido pero consideran que aún debe demostrar si, además, escapaz de ofrecer una alternativa seria a los ciudadanos.

Creen que esa posibilidad le llegará, probablemente, el en debate de Presupuestos que se celebrará en otoño, sobre todo, después de que el año pasado no acudiera a la Cámara Alta para defender la postura de su Grupo y dejara su lugar al secretario de Política Económica, Jordi Sevilla.

En los escaños del Partido Socialista se respira cierta euforia y apuntan que el debate es la constatación de la "tendencia a la baja de José María Aznar y latendencia al alza de Rodríguez Zapatero".

"Ha sido un debate entre un burócrata parapetado en datos y un político que ha dicho, desde la tribuna, lo que piensa la gente", apuntaba a esta agencia un destacado diputado del Partido Socialista.

Aseguran que, a partir de ahora, nadie se atreverá a poner en duda el liderazgo del secretario general del PSOE, aunque advierten de que es conveniente mantener la calma y no lanzar las campañas al vuelo porque, como decía otro alto dirigente, quedan dos años ara las elecciones generales del 2004 y "eso es mucho tiempo en política".

Durante el Debate sobre el Estado de la Nación, Aznar ofreció en algunos momentos un aspecto cansado, que hizo que la voz le fallara durante su réplica a PSOE y CiU. Fuentes cercanas al presidente del Gobierno corroboraron esta impresión y afirmaron que, según sus datos, Aznar no tiene ningún problema físico.