Según informó el Instituto Armado, los arrestos se han producido en Madrid, Valladolid, Sevilla y Barcelona. Además, se han localizado 570 kilogramos de cocaína y más de dos millones de euros procedentes del narcotráfico.

La intervención ha permitido determinar que la banda desarticulada estaba estructurada en tres grupos organizados y conexionados, que se dedicaban al tráfico de drogas y al blanqueo de capitales.

Las investigaciones se iniciaron cuando se tuvo conocimiento de la existencia de una red organizada que se dedicaba a introducir en el territorio nacional importantes cantidades de cocaína procedente de Méjico y Colombia.

Por tal motivo, la Guardia Civil estableció un dispositivo de vigilancia y control, con el objetivo de identificar a los responsables de la red y proceder a su detención.

NEGOCIOS TAPADERA

Fruto de este dispositivo se pudo constatar que la red estaba compuesta por tres grupos, uno integrado por ciudadanos colombianos y otro por ciudadanos mejicanos, ambos encargados de introducir y distribuir cocaína en España.

Asimismo, se comprobó la existencia de un tercer grupo liderado por ciudadanos españoles que utilizaban como tapadera empresas y negocios legales, a través de los cuales blanqueaban los beneficios obtenidos con el tráfico de drogas.

Una vez obtenido el dinero objeto de la transacción, éste era enviado como pago de la droga a través de integrantes de la organización, que alegaban ser turistas y que habiendo finalizado su estancia en España, volvían a su país de origen. En una de estas intervenciones, fueron descubiertos en dobles fondos practicados en sus maletas 685.400 euros, cuyo destino era el aeropuerto de Méjico.

Continuando con las investigaciones se lograba interceptar una partida con la práctica totalidad de la sustancia, cuando el grupo la estaba almacenando en un piso ubicado en el madrileño barrio del Ensanche de Vallecas, logrando intervenir los 550.000 gramos.