DIMISION ALBERO. EL MINISTRO RECONOCE "DEJACION FISCAL"

MADRID
SERVIMEDIA

"Dejación fiscal". Así ha definido el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Vicente Albero, la razón de su dimisión irrevocable. Albero afirma, al mismo tiempo, que su deuda tributaria "si la hay, es mínima, insignificante".

Albero negó, en su declaración pública, que haya sido titular de ninguna cuenta en el banco Ibercorp. Lo que sí afirma es que depositó en el despacho de Manuel de la Concha las ganancias obtenidas tras su pasopor la empresa Marie Claire, con orden de que no se realizaran inversiones especulativas.

Albero se presentó ante los medios de comunicación en un estado de nerviosismo difícilmente disimulable. Eso ha complicado la explicación que el hasta hoy responsable de Agricultura ha dado sobre sus deuda con Hacienda, causa de su dimisión.

Cuando Servimedia le pidió que explicara el carácter de su irregularidad fiscal, el ministro confiesa que lo intentará, pero advierte "encontrarse al límite" de su capacdad.

Con esta advertencia preliminar, la incompleta narración de Albero se inició tras su salida de la empresa textil Marie Claire y su entrada en la vida política.

Siempre según su relato, como ejecutivo de la empresa se vió beneficiado por una serie de incentivos que invirtió en cédulas hipotecarias. A pesar de su afirmación de que se trataba de un activo opaco, legalmente no es así. Las cédulas hipotecarias son un activo tan transparente como cualquier otro, aunque es cierto que su carácter nonominativo le convirtió en uno de los instrumentos financieros menos declarados durante los años ochenta.

Esas cédulas fueron depositadas en el despacho de don Manuel de la Concha, entonces síndico de la Bolsa de Madrid, con la orden de convertirlas "en pagarés del Tesoro", el activo opaco elevado por Miguel Boyer a una de las formas "permitidas" de inversión de dinero negro para financiar el déficit público.

Albero confiesa que se gastó ese dinero al cabo de los años, en gastos domésticos, y queobtuvo un rendimiento inferior al 7 por cien. Al mismo tiempo, en otro momento de su comparecencia ante los medios de comunicación, afirma, volviendo a las cédulas hipotecarias, al parecer origen de los pagarés, que invirtió 37 millones, que le rentaron 1,4 millones de beneficio, algo que sólo se correspondería con el interés histórico e las cédulas en el caso de que hubiesen permanecido poco tiempo en su cartera.

Con su insistencia en que su deuda tributaria "si la hay, es insignificante", Albero recrdó que, no obstante esa insignificancia, dimite porque, en los momentos actuales "se requiere una actitud transparente por parte de los políticos"

Finalmente, ha dejado su cargo de diputado a disposición del Partido. Terminó su intervención pública con una defensa de Felipe González, a quien atribuyó el gran "patrimonio" con el que cuenta España en la seno de Europa.

(SERVIMEDIA)
04 Mayo 1994
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