Martín Blanco realizó estas declaraciones en un acto institucional con motivo del Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo celebrado en el Congreso, al que asistieron varios diputados y senadores.

“Quiero pedir a esta Cámara ambición y generosidad para culminar la reforma del artículo 49 de la Constitución, que plantea cuestiones de decencia democrática como dejar de llamarnos disminuidos”, reclamó. En su opinión, en este tema "no hay grises, no caben equidistancias”.

El director general lamentó que “muchas veces el enfrentamiento gana la batalla al entendimiento”, en referencia a la falta de consenso en torno a la reforma constitucional (para su aprobación definitiva necesita el apoyo de tres quintos del Pleno en ambas Cámaras). La oposición inicial del PP de momento la hace inviable.

Sin embargo, “la discapacidad siempre ha generado los consensos necesarios”, añadió, y apeló por ello a sus “aliados en esta Cámara y también en el Senado. “Volvamos a hacer como cuando (por consenso) abolimos las esterilizaciones forzosas de personas con discapacidad, les devolvimos el derecho al voto o acabamos con la muerte civil que suponían las incapacitaciones judiciales”, propuso.