Según explicaron representantes de Down Madrid, el diagnóstico de discapacidad intelectual suele venir acompañado de importantes problemas de salud (cardiacos, osteomusculares, respiratorios) que, si no son atendidos tempranamente, pueden tener consecuencias graves en el desarrollo de los niños, ya que aumentan la probabilidad de tener ingresos y reducen la participación en entornos naturales reales como el colegio o el parque.

Sin embargo, es habitual que las familias de estos niños pongan el foco en su desarrollo cognitivo, preocupados por su inclusión, cuando también a través del cuidado de la salud se puede conseguir el máximo desarrollo de la persona.

Así, apuntaron que los niños con discapacidad intelectual “necesitan tantas terapias que los padres se ven desbordados, por lo que, a pesar de ser tratamientos necesarios, son, en muchos casos, inasumibles por las familias”. Es por este motivo que la ayuda proporcionada por Fundación Inocente Inocente se utiliza para facilitar que las familias puedan tener acceso a todos los tratamientos necesarios.

Con esta iniciativa, se incluye como novedad la prevención y el mantenimiento de la salud como piezas clave en los tratamientos que, subrayaron, incluyen sesiones de logopedia, de matronatación y otras terapias que benefician a 50 usuarios directos y 150 indirectos. Este abordaje integral permite aumentar los niveles de bienestar, potenciando las capacidades emocionales, cognitivas, motoras y sociales y, a su vez, evitando ingresos y el absentismo escolar, factores que repercuten negativamente en la inclusión de los niños.