En estas catorce provincias los socialistas sólo incrementaron su apoyo en Guipúzcoa, donde sacaron un 23,65 por ciento, frente al 22,6 por ciento de las elecciones de 1996.

Esto supone que el PSOE perdió apoyo en las otras trece provincias en las que pedía a IU que no concurriese: Alava, Badajoz, Baleares, Burgos, Castellón, Ciudad Real, Huesca, A Coruña, Salamanca, Tenerife, Toledo y Valladolid. El descenso de los socialistas en estas circunscripciones fue acompañado de un descenso espectacular de IU, que siguió sin sacar escaños en ninguna de ellas, pero perdió numerosos votos.

Así, la formación liderada por Francisco Frutos pasó en Alava del 11,7 por ciento en 1996 a un 5,62 en las elecciones de ayer; de un 10 por ciento en Badajoz a un 5,39 por ciento, o de un 11,7 en Burgos a un 4,59 por ciento.