Según un informe presentado por las empresas del sector, que en 2002 facturaron un total de 736 millones de euros, la incidencia de Internet va en aumento, ya que se ha convertido en un generador de llamdas de consulta hacia las empresas del sector.

En cuanto a la ubicación geográfica, los empresarios españoles prefieren que estas plataformas se localicen dentro de nuestro país, evitando los problemas socio-culturales que implicarían subcontratar estos servicios en el extranjero.