En un escenario medio (ni el más positivo ni el más negativo), el empleo que las renovables pueden generar en 2020 se sitúa, por lo tanto, en cerca de 250.000 puestos de trabajo, un 42% más que actualmente.

Así se desprende de un estudio elaborado por el Centro de Referencia Energías Renovables de Istas y difundido por CCOO, que incide en que, a estos puestos de trabajo, habría que añadir el números de empleos indirectos, que "puede llegar a alcanzar cifras similares".

De ahí que este documento califique al sector de las renovables de "importante yacimiento de empleo"; una razón clara para apostar por él "en tiempos de incertidumbre económica y laboral", que se suma al hecho de que se trata de "un potente instrumento para mantener el bienestar social y detener el calentamiento global".

El estudio añade que las energías renovables contribuyen directamente al desarrollo de sectores industriales, potenciando el tejido industrial local.

"La producción de energía basada en recursos autóctonos evita las importaciones de combustibles fósiles y uranio del exterior, generando empleo local", señala.

Una tesis que, según Istas, anula las teorías que defienden que las renovables destruyen empleo.

Por otra parte, el sector de las energías renovables "está contribuyendo al crecimiento económico". Según datos de la Asociación Empresarial Eólica, recogidos en este estudio, durante el periodo 2003-2007, el crecimiento del PIB del sector eólico (62%), fue superior al PIB del sector energético (25%).

Finalmente, "las energías renovables favorecen la expansión internacional de sus empresas". Actualmente las empresas españolas de energías renovables exportan y se sitúan en mercados internacionales como los de Estados Unidos, Canadá, Gran Bretaña y Francia, así como en economías emergentes como China y la India.