Izquierda Unida pretende que se cree una nueva comisión permanente en el Congreso, a través de la cual el Gobierno dé cuenta periódicamente al Parlamento de las materias clasificadas y de la actuación de los servicios de espionaje.

Los integrantes de la nueva comisión serían los portavoces de todos los grupos, excepto el Mixto, que está excluido para dejar fuera del acceso a esta información a Herri Batasuna. Ahora, estos diputados conocen los secretos oficiales pero sus reunines no tienen formalmente carácter de comisión, aunque se la denomine como tal.

La proposición no de ley será presentada mañana en rueda de prensa por los diputados Antonio Romero, que mañana abandona su escaño, y Felipe Alcaraz, que será el nuevo portavoz de IU en la Comisión de Defensa.