Así explican fuentes diplomáticas españolas la situación entre los dos países tras el encuentro que el pasado sábado mantuvieron en Roma José María Aznar y el presidente guineano, aprovechando la presencia de ambos en la `cumbre' de la FAO sobre alimentación.

Las fuentes consultadas por Servimedia han insistido en que los casos guineano y cubano son distintos y requieren distinto tratamiento, como claró Aznar en Roma. El presidente admitió que las relaciones con la ex colonia en Africa son "manifiestamente mejorables" y la diplomacia española se ha puesto a ello.

Oficialmente se sigue sosteniendo que "las relaciones son las mismas" que antes del encuentro; es decir, más tirantes de lo habitual desde que el pasado agosto Guinea se negara a admitir la repatriación en un avión de Iberia de 16 inmigrantes ilegales que habían producido disturbios en Barajas al negárseles la entrada en España.

Fentes no diplomáticas resaltan ahora la decisión de Aznar de entrevistarse con Obiang como un gesto de aproximación, posteriormente confirmado con la frase "ayúdanos a ayudarte" que le dijo en referencia al respeto a derechos humanos y libertades. Estas mismas fuentes valoran la reciprocidad por parte guineana, con el anuncio de liberación del político de la oposición Celestino Bakale en el mismo escenario de la `cumbre' de la FAO.

Nuestro país está dispuesto a ayudar a la formación de funcionarios, istituciones y partidos políticos del país centroafricano, además de continuar la política de ayuda al desarrollo, coinciden todas las fuentes consultadas.