Un reciente informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre la protección de la maternidad señala que actualmente 119 países cumpen el convenio de la OIT que prevé una licencia mínima de 12 semanas, aunque recomienda 14, tope que sólo igualan o superan 62 estados.

El informe destaca que entre los países que otorgan las licencias retribuidas de maternidad más prolongadas figuran la República Checa (28 meses, aunque pagando sólo el 69 por cien del salario), Eslovaquia (28 semanas, al 90 por cien), Croacia (6 meses y 4 semanas) Hungría (24 semanas al 100 por cien) y Rusia (20 semanas al 100 por cien).

Entre los países de la Eropa occidental, superan a España Noruega, Suecia y Dinamarca. Italia ofrece permisos de 5 meses, más largos que los de España, que son de 16 semanas, pero con una retribución equivalente al 80 por cien del salario, mientras que la Seguridad Social abona en nuestro país el cien por cien.

También Francia se sitúa por encima de España, con un permiso de entre 16 y 26 semanas, en tanto que Austria ofrece lo mismo que nuestro país, y algo menos Alemania (14 semanas) y Gran Bretaña (entre 14 y 18 semanas, on una retribución inferior al salario).

Los países africanos, asiáticos y americanos se encuentran, en general, muy por debajo del nivel europeo, salvo excepciones como Canadá. Estados Unidos, pese a toda la retórica sobre los valores de la familia común a demócratas y republicanos, ofrece 12 semanas de permiso de maternidad, pero no retribuido.

No obstante, todos estos datos se refieren a los mínimos legales establecidos, por lo que la situación real depende también de los avances logrados por os trabajadores en la negociación colectiva o mediante ventajas obtenidas por otras vías.

Entre los numerosos ejemplos de esta clase esgrimidos por la OIT, el informe hace referencia al caso de los 18.000 profesores que trabajan en los establecimientos públicos de enseñanza del País Vasco, que tienen derecho a 18 semanas de licencia de maternidad, dos más de lo dispuesto por ley.