Se trata de la primera iniciativa de la asociación Arco Iris Solidario, constituída el pasado mes de octubre. "Queremos dar a los niños una especie de dscanso recuperativo, ya que viven en una zona donde la radiactividad es muy alta y, aunque aparentemente no parecen sufrir ninguna dolencia, es imprevisible qué pueden llegar a padecer dentro de unos años", manifestó Jorge Rivera, presidente de la asociación, a "Diario de Navarra".

Los niños, con edades entre 8 y 12 años, llegaron ayer a Burlada procedentes de su país y fueron recibidos por el alcalde y grupos culturales de la localidad, que les entregaron un pañuelo rojo.

Ocho de los niños, procdentes de la localidad rusa de Razan, ya estuvieron el año pasado. Los otros 20 son naturales de Tula, ciudad situada a 300 kilómetros al sur de Moscú.

La familia Priego Beramendi asegura que esta experiencia ha ayudado mucho a sus hijas. La madre, Carmen Beramendi, señaló que sus chicas "han cambiado mucho desde el pasado verano. Han aprendido a compartir y ahora conocen que hay personas que tienen necesidades y a las que hay que ayudar".

Por su parte, el presidente de Arco Iris Solidario asegur que cada año es necesario hacer más trámites legales para poder traer niños extranjeros a España. El próximo 3 de agosto vendrá una segunda tanda de 20 niños rusos a Navarra.