Salud

Los farmacéuticos apuestan por la inteligencia artificial siempre que esté “supervisada y validada” por un profesional

Madrid
SERVIMEDIA

Los farmacéuticos han puesto de manifiesto la importancia de que la salud digital y las nuevas tecnologías, entre ellas la inteligencia artificial, sean “mecanismos de apoyo a la atención farmacéutica”, siempre y cuando su utilización esté “supervisada y validada” por un profesional.

Así se puso de manifiesto durante la celebración del octogésimo tercer Congreso Mundial del Consejo de la Federación Internacional Farmacéutica (FIP), que se ha celebrado en Copenhague (Dinamarca), en el que se aprobaron una serie de declaraciones políticas sobre el papel del farmacéutico en el autocuidado y las enfermedades no transmisibles, acerca de la atención farmacéutica centrada en las personas y la inteligencia artificial, según informó el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos de España.

La FIP reconoció el papel de la salud digital y las nuevas tecnologías, entre ellas la inteligencia artificial, como “mecanismos de apoyo a la atención farmacéutica para mejorar la atención al paciente mediante el análisis predictivo, la gestión de la medicación y la automatización de ciertas tareas administrativas”.

A pesar de ello, precisó que los sistemas de inteligencia artificial “presentan limitaciones que deben tenerse en cuenta, como la tendencia a generar información falsa, los posibles sesgos, la falta de comprensión contextual y la incapacidad de verificar la exactitud de sus resultados”.

Por ello, dejó claro que “los farmacéuticos siempre deben supervisar y validar cualquier proceso de inteligencia artificial que esté relacionado con la prestación de asistencia sanitaria”.

En lo concerniente al autocuidado, la FIP reseñó que los farmacéuticos han de ser “aliados fundamentales en su promoción”, ya que “son accesibles, tienen formación sanitaria y están en contacto directo con los pacientes, ayudándolos a tomar decisiones informadas sobre su salud”.

Para que el autocuidado funciones, se considera oportuno “invertir en la formación continua de los farmacéuticos, asegurar recursos adecuados en zonas remotas y establecer mecanismos para que estos servicios sean remunerados y reconocidos”.

Por esa razón, reclamó a los gobiernos que “integren formalmente a los farmacéuticos en las estrategias de salud, promuevan el acceso a productos seguros de autocuidado y cuantifiquen los beneficios de estas intervenciones en la población”.

Respecto a las enfermedades no transmisibles, la FIP aseguró que el papel de los farmacéuticos resulta “clave”, ya que “pueden detectarlas tempranamente, educar a los pacientes, revisar tratamientos y mejorar el seguimiento, ayudando a prevenir complicaciones y reducir muertes”.

Sobre la atención farmacéutica centrada en el paciente, se abogó por “un modelo que implica recoger información del paciente, evaluar su situación, planificar el tratamiento, implementarlo y hacer seguimiento continuo”; mientras que en lo relacionado con la resistencia a los antimicrobianos se confirmó el compromiso de la FIP con el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) sobre la resistencia antimicrobiana de la ONU.

La participación española en el Congreso Mundial de la FIP estuvo compuesta por el presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos de España, Jesús Aguilar; su secretaria general y vicepresidenta de la FIP, Raquel Martínez; y su tesorera, Rita de la Plaza.

(SERVIMEDIA)
04 Sep 2025
MST/pai/mag