Se trata de un contrato de financiación privada (PFI), por el cual los tres municipios, conocidos por la Mancomunidad RE3 y situados al oeste de Londres, pretenden aportar una solución sostenible para la gestión de las 220.000 toneladas anuales de residuos que producen sus hogares.

WRG deberá efectuar diversas inversiones para la construcción de puntos limpios, estaciones de transferencia y una planta de reciclaje, por un importe de 68 millones de libras esterlinas, algo más de 100 millones de euros.

Estas instalaciones permitirán a los tres municipios, que tienen una población conjunta estimada de 500.000 personas, alcanzar altos niveles de reciclaje y compostaje durante los 25 años del contrato, que superarán los objetivos marcados por el Gobierno central en cuanto a la reducción del uso de los vertederos.

Waste Recycling Group fue adquirida el pasado mes de julio por FCC, dentro del plan estratégico de la compañía que controla Esther Koplowitz. Uno de los objetivos de este plan es lograr que la cifra de facturación en el exterior sea aproximadamente el 35% del total. El precio de la operación ascendió a 2.036 millones de euros.