Este programa tiene como objetivo favorecer la inclusión social y laboral de las personas que viven con estas patologías con el fin de que puedan optar a las mismas oportunidades educativas.

Hay más de 1.400 enfermedades metabólicas hereditarias y más de 6.000 enfermedades raras conocidas, como la fenilcetonuria, la mucopolisacaridosis o la acondroplasia. Muchas de estas patologías son graves y pueden tener manifestaciones físicas y neurocognitivas que afectan a la capacidad funcional e independencia de los pacientes. Debido a esto, desde ambas fundaciones han repetido este año su programa de becas que tiene como fin facilitar la inclusión de estas personas en el ámbito educativo.

Este programa de becas está abierto a jóvenes residentes en España que sufran una enfermedad metabólica o genética y que se vayan a matricular en un grado, un máster o cualquier otro tipo de formación académica en el año 2022/2023. Las candidaturas deben enviarse a través de la web oficial y serán recibidas por la Secretaría Técnica de la Feemh y ALPE entre el 4 de julio y el 31 de agosto.

Las personas interesadas tendrán que argumentar por escrito con que finalidad solicitan la beca y como les ayudaría recibirla. Cada uno de los cuatro ganadores será escogido por un panel de expertos de las dos asociaciones y recibirá una beca valorada en 2.000 euros.

La directora de ALPE, Susana Noval, aseguró que estas becas no solamente son importantes para los jóvenes, sino también para sus familias, “ya que tener un hijo con discapacidad supone un gasto de recursos personales y económicos muy importantes, y tampoco es fácil a veces motivarles cuando llegan a una determinada edad, por lo que la inclusión educativa es fundamental”. A nivel de visibilidad, concluyó, “estas becas ayudan a conocer y respetar las dificultades a las que se enfrentan estas personas y conseguir una mayor normalización”.