Cultura

Felipe VI afirma que la obra de Luis Mateo Díez engrandece “el legado de los grandes fabuladores de la literatura universal”

Madrid
SERVIMEDIA

El rey Felipe VI atestiguó este martes que la obra de Luis Mateo Díez sobresale por su “calidad artística” y por un dominio del lenguaje que “nos aproxima al enigmático proceder del ser humano en múltiples circunstancias”, lo que provoca que en cada título el escritor leonés proponga “nuevos retos” y amplíe su “original imaginario, acrecentando el legado de los grandes fabuladores de la literatura universal”.

Lo dijo durante su discurso en el acto de entrega del Premio Cervantes 2023 a Luis Mateo Díez, un evento que tuvo lugar en el Aula Magna de la Universidad de Alcalá de Henares (UAH) en el que estuvieron presentes el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; el ministro de Cultura, Ernest Urtasun; la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso; la alcaldesa de Alcalá de Henares, Judith Piquet; el rector de la UAH, José Vicente Saz; la directora general del Libro, del Cómic y la Lectura, María José Gálvez; el director del Instituto Cervantes, Luis García Montero; y el director de la Real Academia Española (RAE), Santiago Muñoz Machado, entre otras autoridades.

Felipe VI proclamó que para la reina Letizia, presente en el acto, y para él mismo supone “un verdadero placer” presidir la entrega del Premio Cervantes, una “tradición de la que disfrutamos y que admiramos”.

Afirmó que Luis Mateo Díez, galardonado con el Premio Cervantes 2023, “se incorpora ya a la relación cervantina de los mejores escritores de la lengua española”. Del escritor, nacido en Villablino (León) en 1942 evocó “su deuda con las literaturas populares porque realizó el aprendizaje de lo imaginario en la tradición de la oralidad” y el “importante papel que tuvo en su niñez la biblioteca familiar y el hecho de que su padre, Florentino, velara siempre porque los clásicos, los griegos, los latinos y nuestros escritores del Siglo de Oro despertaran en él -y en sus hermanos- la mayor atención e interés”.

El Rey subrayó que “la imaginación y la memoria constituyen, junto con la palabra, la base de su obra”, y apuntó que el escritor leonés ha considerado la ficción como un viaje cuyo arquetipo “se asienta en el género novelesco”.

Manifestó que inspirado en la “sugerente idea de la provincia del hombre”, planteada por Elías Canetti, Luis Mateo Díez “fue consciente de su necesidad de apropiarse de una provincia imaginaria”, que en su caso fue Celama, “un hallazgo y un destino” en el que “confluyen mito, imaginación y memoria”, que es “metáfora del crepúsculo de las culturales rurales que profundiza, a su vez, en la misteriosa condición del ser humano”.

En ese sentido, sugirió que “este paisaje imaginario tiene cierto correlato con el real, con el páramo leonés donde transcurrieron algunos veranos del escritor, sobre todo cuando la vida de sus padres llegaba a su fin”.

Felipe VI señaló que en la obra de Luis Mateo Díez “hay soñadores pertinaces”, siendo los “personajes perdedores y solitarios” los que “se erigen en signo determinante” de su trayectoria en la que la “hibridez” es un “rasgo sobresaliente”.

Luego de indicar que “la expresión ‘enfermedades del alma’” es otra de “las señas de identidad” de la obra del escritor leonés, consideró que “en una inigualable tradición cervantina” ésta “destaca por su calidad artística, con un dominio del lenguaje, como acredita su escritura, que nos aproxima al enigmático proceder del ser humano en múltiples circunstancias”.

En cada una de sus obras, concluyó Felipe VI, “plantea nuevos retos y expande su original imaginario, acrecentando el legado de los grandes fabuladores de la literatura universal”.

(SERVIMEDIA)
23 Abr 2024
MST/clc