Según los datos facilitados por la DGT, recogidos por Servimedia, las retenciones afectaban a 25 kilómetros en la citada vía, 12 de ellos ya en Madrid, hasta la localidad de Collado Villalba, y 13 más en Segovia, a la altura del peaje de El Espinar.

Unas fuertes retenciones que se producen pese a que la Dirección General de Tráfico ha habilitado 25 kilómetros de carril adicional en la citada vía, ocupando uno de los carriles de salida de la capital.

Dicha medida también ha sido adoptada en otras vías, como la carretera de Valencia (A-3), con 46 de kilómetros adicionales habilitados; la de Burgos (A-1), con 28,5; y la de Andalucía (A-4), aún en la provincia de Toledo.

En la carretera de Burgos, a la altura de Alcobendas, y en la de Extremadura (A-5), en Navalcarnero, se registraba un kilómetro de retención en cada caso en la entrada a Madrid.

Los problemas también se extendían a otros puntos lejos de la capital de España, principalmente en la AP-7 (autopista del Mediterráneo) en Tarragona, con tres kilómetros de retención, y en la A-7 en Málaga, con cinco kilómetros de circulación lenta.

En la N-332 en Santa Pola, provincia de Alicante, los conductores se enfrentaban a seis kilómetros de atasco.