GAL. LOS POLICIAS DEL PUESTO FRONTERIZO POR EL QUE MAREY ENTRO EN ESPAÑA COINCIDEN CON LA VERSION FACILITADA POR 10 PROCESADOS

- Relatan que "un moro" (Mohamed Talbi) llegó la noche de los hechos a Dancharinea, donde fue recogido por Amedo

- Aseguran que Michel Domínguez realizó varias llamadas telefónicas en francés cuando Marey fue liberado

MADRID
SERVIMEDIA

Los dos poliías que vigilaban el puesto fronterizo de Dancharinea (Navarra), lugar por el que supuestamente Segundo Marey fue introducido en España, coincidieron hoy en sus declaraciones con lo relatado por diez de los procesados que han reconocido los hechos que juzga el Tribunal Supremo.

Ambos funcionarios, Jesús Rodríguez Velasco y Francisco Javier Calabria del Pozo, coincidieron en que, en la noche en la que se produjeron los hechos (4-12-1983) "un moro", al que luego reconocieron como Mohamed Talbi, vestido on una gabardina clara "estaba rondando sobre las diez de la noche por las cercanías del puesto fronterizo".

Procedieron entonces a identificarle y pidieron datos a Pamplona, donde están ubicados los ordenadores centrales con datos personales. Desde la capital navarra les comentaron que se trataba de un ciudadano francés sin antecedentes penales.

En ese momento, Talbi mostró a los dos policías un papel con un número telefónico de la Jefatura Superior de Policía de Bilbao, y dijo que estaba esperado a un policía español. El comisario Calabria llamó entonces a su jefe directo en Pamplona, quien, veinte minutos después, le informó de que se trataba de una operación "directamente dirigida desde Bilbao, y que no moviéramos ni un dedo".

Unos minutos más tarde, según refirieron, les llamaron desde Bilbao, y les notificaron que llegaría un policía -el comisario Amedo- para hacerse cargo de Talbi. Ambos policías negaron haber visto más gente esa noche.

LIBERACION

Desde esa fecha no volvieron a er a nadie más. Unicamente el día de la puesta en libertad llegaron dos coches, que estacionaron aproximadamente a un kilómetro del puesto fronterizo, que ya estaba cerrado puesto que eran más de las diez de la noche.

Los dos policías de la frontera indicaron a Amedo y Domínguez que se podía pasar el límite con Francia por "hasta ocho o nueve" puntos diferentes, y les dejaron.

Cuando regresaron, Michel Domínguez les pidió que le mostrasen dónde había una cabina telefónica, que no existía. Uno de os policías, concretamente Jesús Rodríguez Velasco, acercó a Domínguez a su casa, desde donde hizo varias llamadas, todas ellas en francés.

El funcionario negó que Domínguez leyera ningún documento por teléfono, o por lo menos que él lo viera, y sí recordó que entre lo que recuerda haber oído estaba la palabra "Sudoeste", en relación al periódico del sur de Francia donde se publicó al día siguiente la liberación de Marey.

También relató que Michel Domínguez le había solicitado el teléfono de la cmandancia de la policía al otro lado de la frontera, donde supuestamente llamó para comunicarles la liberación del secuestrado.

Para hoy estaba prevista la comparecencia también del jefe superior de policía de Pamplona, Eduardo Couto, quien supuestamente habría sido el interlocutor entre estos dos policías de la frontera y el delegado del Gobierno en Navarra, en aquellas fechas, Luis Roldán, quien a su vez, según han declarado algunos procesados, llamó a Rafael Vera para enterarse de lo que estaba pasndo.

Por cuestiones de tiempo, ha sido retrasada para mañana la comparecencia de Eduardo Couto. Tras él, está previsto que sean interrogados el propio Luis Roldán y el ex director del Cesid, Emilio Alonso Manglano, entre otros.

(SERVIMEDIA)
09 Jun 1998
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