Según la Memoria, se han incrementado las ventas netas en más de un 9%, pero los beneficios suponen poco más de 21.200 millones de pesetas, un 31% por debajo del año anterior. La crisis se ha hecho notar, aunque el secretario general del GME, Javier Oraa, considera que las cifras no son del todo malas. Oraa señaló que en los últimos años GME obtuvo unos beneficios del orden de 34.000 millones de pesetas en el 90 y 30.000 en el 91, "pero consideramos que a pesar de la reducción de beneficios respecto al año 92, que ascienden a 21.000 millones, el dato es positivo".

En su informe de 1992 General Motors señala que la cifra de coches vendidos en el mercado nacional fue de 11.700, tanto importados como fabricados en España. De ellos, 46.000 correspondieron a modelos Corsa y Astra, fabricados en la factoría zaragozana de Figueruelas.

Durante ese año la planta de Zaragoza produjo 378.000 vehículos, un 4% menos que los fabricados en 1991.

En definitiva no ha sido un buen año, la crisis ha estado presente, pero los responsables de la multinacional aseguran que el ejercicio no ha sido tan negativo.