Así lo confirmó Montero en una entrevista en RNE recogida por Servimedia al ser preguntada por la situación de esta medida tras la decisión de no aprobar Presupuestos nuevos este año ante el adelanto de elecciones en Cataluña, al igual que un paquete de incentivos para empresas energéticas que realicen inversiones estratégicas.

“Tiene que estar aprobado antes del final de año, porque son todas figuras tributarias que se devengan, es decir, que se pagan cuando ya hay ejercicio vencido. Y eso significa que tenemos durante todo este periodo para llegar a un acuerdo con las distintas fuerzas políticas”, expresó Montero, quien añadió que ambas medidas “tienen fuerza de ley”.

Sobre la primera, la de acompañar la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) a la bajada del IRPF para las rentas que se encuentran por debajo de los 20.000 euros, Montero explicó que ya se hizo anteriormente y añadió que “eso tiene que ser una realidad antes de que se devenga el IRPF de este año”, que no se hará hasta el año 2025. “Estamos trabajando en ello”, apuntaló.

Por otra parte, mantuvo su “compromiso” de “incorporar” un incentivo a las empresas energéticas, “tanto en el gravamen temporal, que actualmente está en vigor, como en el impuesto definitivo, que tiene vocación de tener permanencia y que estaría operativo, si todo se consensúa, para el año 2025”.

Así las cosas, la vicepresidenta primera concluyó que su “idea” es aprobar un “paquete legal” que pudiera albergar estas dos cuestiones y que pueda estar “operativo” antes de que acabe el año.

“Tenemos tiempo y lo seguiremos haciendo con diálogo, con palabras, porque hay diferentes sensibilidades dentro del arco parlamentario y nos corresponde al Gobierno ponerlas de acuerdo”, zanjó Montero.