El titular de Medio Ambiente, Jaume Matas, durante la sesión de control al Gobierno celebrada ayer en el Senado, acusó al Ejecutivo balear de "poner trabas" a su proyecto de construcción de las mencionadas desaladoras, para lo cual dispone ya de un presupuesto de 15.000 millones.

En declaraciones a Servimedia, la consellera de Medio Ambiente del Gobierno balear, Margalida Rosselló, aseguró que estádispuesta a entablar un diálogo con el Ministerio de Medio Ambiente sobre esta cuestión.

Sobre este particular, añadió que "lo que sí consideramos es que tiene que haber estudios técnicos que avalen la necesidad real de estas desaladoras, así como un análisis de las consecuencias que se puedan derivar del consumo energético de las mismas".

Añadió que, para combatir la sequía que padecen las Islas Baleares, hay medidas prioritarias a la instalación de desaladoras fijas, entre las que citó la arobación del Plan Hidrológico de las Islas, la finalización del trasvase de Sa Costera y la ampliación de las desaladoras de Palma de Mallorca y Formentera.

Insistió en que, al margen de las medidas que se puedan tomar en un futuro, hay que buscar soluciones inmediatas que palíen la situación de sequía por la que, en la actualidad, están pasando las islas.

Por último, subrayó que las Baleares están pasando por la sequía "más grave de todo el siglo", por lo que -apuntó- "se precisan unas unidaes móviles de desalación en la Bahía de Palma con el fin de verter a la red agua suficiente para combatir la sequía".