Borrell hizo estas declaraciones en Gerona, donde firmó un convenio con los ayuntamientos de esta ciudad y de Salt para invertir un total de 1.900 millones de pesetas en diversas obras públicas.

El titular de Obras Públicas y Transportes consideró que el proyecto de la consejería homónima de la Generalitat de situar la estación del tren de alta velocidad cerca del aeropuerto de Gerona tendría una incidencia irrelevante porque la mayoría de los vueos que operan en el mismo son charters.

En su opinión, el 50 por ciento de viajeros que utilizarán el tren de alta velocidad son del área urbana de Gerona, y un 20 por ciento del área de Figueres (Gerona), motivo por el que su ministerio piensa que es más conveniente construir la estación entre los municipios de Salt y Vilablareix.

Según Borrell, "pensamos que es mejor servir al núcleo urbano de Gerona y de Salt, y que la estación sea urbana, ya que también podría servir al aeropuerto porque les epararían sólo 10 kilómetros de autopista".

El ministro añadió que su departamento "lamenta que las autoridades urbanísticas de la Generalitat hayan actuado de una forma unilateral, como nos tienen acostumbrados", refiriéndose a la reserva que hizo de unos terrenos para ubicar la estación.

José Borrell aseguró estar dispuesto a detallar el proyecto del Gobierno sobre el tren de alta velocidad al presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, e insistió en que el ministerio no actuaá unilateralmente. "Estoy seguro de que con una colaboración leal, abierta, con un afán de protagonismo y más ganas de trabajar conjuntamente, ayudaríamos a servir mejor a los ciudadanos".

Borrell indicó que el Tren de Alta Velocidad podría llegar a Gerona y a la Jonquera antes del año 2004 una vez establecido el acuerdo con el Gobierno francés y con colaboración institucional.