Infancia
El Gobierno quiere garantizar que haya al menos dos trabajadores en cada turno en los centros de acogida de menores
- El Ministerio de Juventud e Infancia fija en 10 el número de plazas máximas para las residencias de acogimiento de menores
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
El Ministerio de Juventud e Infancia prepara un real decreto sobre los sistemas de acogimiento de menores que obligará a las comunidades autónomas a contar de forma permanente con una plaza residencial por cada 2.250 habitantes. Las residencias deberán estar atendidas en todo momento como mínimo por dos trabajadores, incluso cuando el número de niños o adolescentes que haya en el centro sea inferior a cuatro.
Según indicaron fuentes del Ministerio de Juventud e Infancia a Servimedia, el objetivo de este real decreto es establecer unos "estándares mínimos en los centros de acogida residencial de todo el país para garantizar la protección, la seguridad y el respeto de los derechos de las personas menores de edad en situación de desamparo o guarda provisional".
Con esta normativa, explicaron fuentes del Ministerio que dirige Sira Rego, se persigue fomentar la desinstitucionalización, favoreciendo el acogimiento familiar y promoviendo recursos residenciales "lo más parecidos posible a un hogar".
PLAZAS POR COMUNIDAD AUTÓNOMA
La norma recoge que cada comunidad autónoma deberá tener un número mínimo de plazas residenciales en función del número de habitantes. En concreto, el texto establece que "de forma preferente" cada comunidad autónoma deberá contar con una plaza residencial por cada 2.250 habitantes.
Con esta medida lo que busca el Ministerio es "transitar desde la generación de las plazas a demanda" que existe en el modelo actual "a la existencia estructural de las plazas", lo que en su opinión permitirá crear entornos más acogedores y estables.
Además, el texto contempla como objetivo "que los centros tengan, como máximo, 10 plazas, y en caso de que no fuese posible, que no se superen las 15. De esta forma superamos el actual modelo en el que, de forma mayoritaria, las plazas se generan a demanda evitando generar recursos estables y de calidad", detallaron fuentes del Ministerio.
La norma establecerá también la capacidad máxima de los dormitorios de los centros de acogida, que se fijará en 2 plazas con camas individuales. Las habitaciones deberán tener, al menos, cinco metros cuadrados por plaza.
El texto recoge otra obligación para las comunidades autónomas y es que el Ministerio quiere que se realicen inspecciones de los centros de acogimiento residencial, conforme a la normativa, y que los resultados de esas inspecciones sean remitidos al Ministerio.
También se recoge en el texto de Juventud e Infancia que los centros deberán contar con salas independientes de descanso y esparcimiento, zonas verdes siempre que sea posible y salas específicas de estudio para los niños, niñas y adolescentes. Además, se especifica que los centros deberán estar ubicados próximos a centros sanitarios, educativos y de ocio. Y se especifica que los centros deben ser "entornos seguros, saludables, accesibles, confortables y acogedores. Lugares, en un sentido similar, de buen trato y libres de violencia".
TRABAJADORES
En este sentido, el real decreto expone también que la persona que dirija el centro deberá tener "formación en intervención social o psicoeducativa", y cada centro contará con una persona con formación en educación social por cada cuatro personas menores de edad residentes. Además, todos los centros deberán contar con al menos una persona con formación en psicología infanto-juvenil o psicología, y especializada en derechos humanos y derechos de la infancia.
Según detalló el Ministerio, el texto establece que "en cada turno de trabajo habrá como mínimo dos personas trabajadoras, incluso cuando el número de personas menores de edad sea inferior a cuatro. En caso de centros cuya especialización motive un número de plazas superior, las ratios serán de dos personas trabajadoras por cuatro personas menores de edad. Y, en todo caso, en cada turno habrá presencialmente, como mínimo, tres personas trabajadoras".
FORMACIÓN PARA LA VIDA
Además, Juventud e Infancia quiere que se promuevan programas formativos de apoyo familiar y crianza positiva dirigidos a las familias de origen, así como "programas de preparación para la vida independiente" que capaciten a los jóvenes para su inserción sociolaboral, y les ofrezca asesoramiento jurídico, la gestión de becas o ayudas económicas o el apoyo para el acceso a la vivienda.
Con respecto a las necesidades básicas materiales, el real decreto indica que "se facilitará a toda persona menor de edad una dotación y equipamiento suficiente, incluyendo los recursos económicos para gastos de uso personal conforme a la edad y material para el desarrollo de las actividades en las que se participe".
(SERVIMEDIA)
10 Oct 2025
MAG/clc


