Estos cines deberán proyectar una película comunitaria por cada cuatro de países no pertenecientes a la Unión Europea, en vez de una por cada tres, como se exigía hasta ahora.

El real decreto modifica los del 24 de enro y 27 de junio de 1997 e introduce el establecimiento de las condiciones para la realización de coproducciones televisivas, así como las ayudas que podrán percibir las películas procedentes de televisión.

La nueva normativa facilita las condiciones de acceso a préstamos en los convenios de financiación que suscriba el Instituto de la Cinematografía y las Artes Audiovisuales (ICAA), del Ministerio de Educación y Cultura, para las inversiones en los cines de pequeñas localidades y establece las condicones especiales para planes de distribución destinados a salas de cine rurales y para la distribución de películas en lenguas minoritarias.

Además, reconoce formalmente la desaparición de la licencia de doblaje, una obligatoriedad que había desaparecido de hecho desde el pasado año, según el Gobierno. Finalmente, delimita las ayudas que podrán percibir las películas procedentes de una serie de televisión.