Además, calificó de "ultrajante y profundamente injusta" la decisión del Gobierno de hacer "perder capacidad adquisitiva real a los funcionarios".

"El Gobierno", dijo, "que no ha sido capaz de cuajar un acuerdo con los grupos parlamentarios de la oposición y al que, por la rigidez de sus posiciones, le ha fallado la negociación con los sindicatos, reaccionó con l intemperancia y la soberbia a que nos tiene acostumbrados, retirando su propia oferta de subida del 4 por ciento y dejándola en apenas un 2 por ciento, a través de un crédito extraordinario".

Esto supone, según Gómez-Calcerrada, "castigar a los funcionarios públicos con una congelación salarial que nunca antes se atrevió a practicar un gobierno democrático".

"El CDS rechaza que haya que sacrificarse la capacidad adquisitiva de amplios sectores de personas y familias, en aras de unos planteamients presupuestarios discutibles", agregó.

Recordó que anteriormente al Gobierno ya había adoptado medidas "de dudosa eficacia", como la reducción del 10 por ciento del complemento de productividad y la congelación de la oferta de empleo público, y denunció que esta congelación de ahora "es simplemente una medida fácil para no enfrentarse al verdadero problema del crecimiento desbocado del déficit público".

"Ni la reducción del número de funcionarios ni la congelación de retribuciones son la solució", dijo el dirigente centrista, para quien el recorte del gasto tiene que venir por otras vías, "básicamente por la reordenación de los gastos, la eliminación de organismos administrativos improductivos, de altos cargos innecesarios y de subvenciones y subsidios clientelares".