En un comunicado de prensa, Greenpeace propone como medidas de presión no repostar en las gasolineras Shell y no comprar productos de esa compañía, ya que "sólo con una acción internacioal decidida podremos hacer cambiar la actitud a la multinacional".

Además, la organización ecologista ha pedido a Shell España que se oponga a la decisión adoptada por la sección británica de la compañía.

El portavoz de Greenpeace, Juan López Uralde, declaró que el hundimiento de la plataforma "crearía un precedente muy peligroso, ya que hay miles de plataformas en diversos mares del mundo, cuyo destino final será, si no lo impedimos, el hundimiento en el mar, a pesar de su carga tóxica".