Los diputados adscritos al "guerrismo" y al sector "renovador" se reparten prácticamente a un cincuenta por ciento las presidencias de comisión, así como los cargos de coordinadores y portavoces.

En las presidenias de comisión no hay novedades significativas respecto a la pasada legislatura, aunque ahora se percibe un ligero predominio de parlamentarios afines al sector "renovador". Entre ellos, figuran el ex ministro Jordi Solé Tura (Exteriores), el diputado sevillano Alfonso Lazo (Defensor del Pueblo) o el gaditano Eduardo García Espinosa (Peticiones).

En Defensa, el "guerrista" Carlos Sanjuán cede el puesto a Juan Muñoz, ex vicepresidente primero de la Mesa del Congreso, y en Justicia e Interior, continúaJavier Barrero.

De los partidarios del ex vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, acceden a presidentes de comisión los ex ministros de Trabajo Luis Martínez Noval, y de Relaciones con las Cortes Virgilio Zapatero.

Respecto a las portavocías, sobresale el desalojo de Justicia del asturiano Alvaro Cuesta, responsable la pasada legislatura de la tramitación del Código Penal. En su lugar, estará el ex magistrado y diputado por Lugo Ventura Pérez Mariño, uno de los "fichajes" famosos de Felipe Gnzález la pasada legislatura.

José María Mohedano, dimitido como secretario general del Grupo Socialista por su vinculación con el empresario Pinto Fontán, será sustituido por el diputado por Salamanca, Jesús Caldera.

Solchaga ha decidido recolocar a Mohedano al frente de la portavocía de la Comisión Constitucional. De ese modo, Mohedano volverá a estar en la dirección permanente del Grupo Parlamentario Socialista.

Durante la rueda de prensa en la que informó de los nombramientos producidos oy, Solchaga aseguró que cuando Mohedano presentó la dimisión, ya dijo que pensaba seguir contando con él, aunque políticamente consideraba conveniente su renuncia al cargo.

A su modo de ver, Mohedano está muy capacitado para su nuevo cometido, que, en su opinión, es de carácter "más interno" y tiene menos imagen exterior que el anterior de secretario general.

Solchaga insistió hoy en que se ha decantado por unos diputados en lugar de otros sólo por su competencia y disponibilidad de tiempo para l cargo.

"He hecho lo posible para que los elegidos no pudieran ser atacados por su competencia y he evitado cuidadosamente cualquier gesto que pudiera ser interpretado como sectario", afirmó.

A ese respecto, recordó que no hay ningún miembro de la Ejecutiva por la única razón de que "en el partido tienen mucho trabajo".

Se mostró convencido de que la disciplina en el grupo está "garantizada", porque así se lo han dicho expresamente incluso diputados que no son próximos a él.

"He recibio llamadas de compañeros que me han dicho que no me votaron, pero que me han asegurado que están a mi disposición y que la disciplina en el grupo está garantizada", explicó el ex ministro de Economía y Hacienda.

El portavoz socialista concluyó señalando: "Tras mi elección, que no se oculta que fue difícil, no hay necesidad de pacificación en el grupo".