Entre Melilla, Almería y Alicante tuvo lugar la operación "Júpiter", en la que se interceptó una "zodiac" cargada con 93 fardos de hachís, que alcanzaban un peso total de 2.790 kilos. Se detuvo, además, a nueve personas, de las cuales, siete eran cuidadanos marroquíes, uno era español y otro, británico.

También en Almería y Alicante se desarrolló la operación "Dulce", que se saldó con la localización de un alijo de hachís oculto en un camión abandonado en la localidad de Guardamar- Santa Pola. Se intervinieron 5.000 kilos de la sustancia.

En Granada tuvo lugar el operativo denominado "Marejada", en el que, a través de dos intervenciones, la Guardia Civil se hizo con otras cinco toneladas de resina de hachís que se encontraban repartidas entre un barco interceptado cerca de la costa granadina y un camión localizado en la zona de Rambla Albuñol. Se efectuaron cuatro detenciones.

Por último, en Valencia, cinco ciudadanos marroquíes fueron apresados en el desarrollo de un operativo por el que se requisaron tres toneladas de la citada droga que se hallaban fragmentadas en 90 fardos ocultos en una furgoneta.