En este sentido, señaló que el lunes la Ejecutiva lo que hizo fue "no acordar convocatoria de primarias y no acordar otra cos más que el Comité Federal", pero precisó que éste "puede tomar otras decisiones si lo cree pertinente. No es que la Ejecutiva tenga capacidad para cerrar las vías". Agregó que "en una situación como la que ha ocurrido probablemente hubiese sido más conveniente, me parece a mí, acelerar que el Comité Federal estudiara la situación".

"Si el Comité Federal se reúne y cree que lo más pertinente es convocar un Congreso, pues hará muy bien y, desde luego, no será ninguna locura, dada la situación que hay. a Ejecutiva ha decidido que no, pero el Comité Federal también puede decidir", afirmó.

Preguntado si piensa que la dimisión del jefe de la oposición hubiese exigido un debate en el partido, Guerra dijo con ironía que "el Grupo Parlamentario se ha convocado para eso. No es que lo que crea yo, lo cree todo el mundo. Los que han convocado el Grupo lo han convocado para que hubiera un debate. Después pasan otras cosas", dijo respecto a la ausencia de debate en la reunión del Grupo Parlamentario Socialista

Guerra consideró "un poco curioso" que se hagan primarias para elegir candidatos y "que después los candidatos sean los que no ganan en las primarias. Como mínimo resulta chocante", añadió.

PROBLEMA SIN RESOLVER

El ex vicesecretario general del PSOE explicó que el último congreso ordinario "no parece que haya cumplido las expectativas que los que lo organizaron, los que ganaron en el Congreso, habían puesto. Así que hoy no está todo lo ordenada que debiera la cuestión. No ha quedado definitivaente resuelto porque hubo un problema de representatividad, porque el secretario general, que llevaba 24 años siéndolo, dimitió y hubo 24 horas horas frente a 24 años para decidir. Se decidió de la forma que se decidió".

"Después", agregó, "se convocaron unas primarias para designar el candidato a las elecciones legislativas, que no eran necesarias, según el Congreso. Se convocaron para legitimar lo que del Congreso no había sido muy representativo y resultó que había dos candidatos y el vencedor fue l que no se esperaba y algunos no deseaban. Eso trastocó bastante las expectativas, los proyectos que se deseaban. Eso no ha quedado resuelto, como se ve ahora mismo".

"Efectivamente hay un vacío que habrá que rellenar y habrá que rellenar como decida el Comité Federal. La Ejecutiva no zanja ese problema, lo zanja el Comité Federal".

Guerra consideró "curioso que los que inventan las primarias, no quieren primarias ni a mil kilómetros. Yo, que no he sido nada inventor de las primarias, ya me ha scedido en una ocasión, cuando se eligió candidatura por Madrid, tener que decir 'pero bueno ¿no se han establecido las primarias, cómo ya no se hacen?. Resulta que a los no inventores les quieren ahora asignar el papel de defender la existencia de primarias. Yo espero que las defiendan los que confiaban absolutamente en las primarias".

"Lo que pasa", explicó, "es que las primarias han dado un resultado relativo, muy relativo, porque han hecho una participación importante de la gente, un entusiasmo delmilitante y no sólo del militante, pero es verdad que hay unos cuantos que siendo perdedores en las primarias son los candidatos y eso es una contradicción muy fuerte. Pero ese problema no lo tengo que resolver yo, lo tienen que resolver los que han hecho el gran panegírico de las primarias".

Respecto a que Felipe González se haya descartado como cartel electoral del partido, afirmó que "él se ha autoexcluido de esa posibilidad, me parece que se ha excluido no sólo para un momento coyuntural y tiene tdo el derecho a excluirse, y los demás deben optar sabiendo que está excluido".

PREOCUPACION PARTIDARIA

Preguntado si la solución del Partido Socialista pasa porque haya un acuerdo entre el sector guerrista y el sector renovador, Guerra dijo: "El Partido Socialista es un partido fuerte, yo lo creo muy vivamente, que ha pasado por unas etapas difíciles en su historia -ésta no es una etapa difícil de la historia del partido, de ninguna de las maneras- y ahora tiene un trance complicado que no deriva d que tal sea mejor o cual sea peor".

"Deriva", continuó, "de que el partido en marzo del 77 era un partido ilegal; en el 79 tenía 60.000 responsables políticos en cargos institucionales, y en el 82 tenía toda la representación en comunidades autónomas, en el Gobierno de España en los municipios y lo que ocurre es que el partido tiene una etapa en la que se vuelca hacia lo institucional de una manera muy poderosa, en detrimento de lo partidario y hoy los cuadros medios del partido tienen mucha preocupaión institucional y mucha menos preocupación partidaria y eso a la larga es una factura muy difícil. Hay que pagarla".

Agregó que "las 4.000 personas de la dirección (en sentido amplio) del partido tienen que volver algo los ojos hacia el proyecto político del partido, sin olvidarse de las responsabilidades institucionales, pero no volcándose sólo en lo institucional. Ese creo yo que es el verdadero problema del partido, muy comprensible por cierto, porque fue la única organización que fue capaz de poer en unas listas a miles y miles de personas después de 40 años sin práctica de la libertad en este país. Entonces, es muy comprensible pero, claro, hay que resolverlo por muy compensible que sea, que no veo ninguna comprensión en los papeles y en las ondas que ustedes representan", dijo en relación a los medios de comunicación.

A juicio de Guerra, "no se trata tanto de que haya un sector A y un sector B que tengan que ponerse de acuerdo, se trata de que haya un proyecto claro de partido, además de poyecto institucional. No se trata sólo de hacer programas electorales, que es importantísimo, se trata de tener un proyecto a 20 a 30 años para una nación, y eso hoy no lo tiene nadie más que el Partido Socialista".