Galparsoro falleció el pasado 26 de septiembre tras arrojarse por una ventana de la Jefatura Superior de Policía de Bilbao, donde estaba detenido, según dijo Corcuera.

Según HB, la autopsia señala que "las lesiones descritas en el plano anterior de ambas extremidades inferiores, que no se pueden corresponder con el mecanismo de caída y, a pesar de la coloración tenue que presentan, no tienen una antigüedad inferior a las otras y mantiene, según los datos suministrados por el Instituto Nacionl de Toxicología, un carácter reciente, de lo que se deduce que la intensidad con que se ha producido ha sido menor, siguiendo un mecanismo de apoyo forzado o traumatismo directo".

Por ello, HB deduce que "Kalparsoro fue colgado de la ventana de la comisaría de Indautxu, sujetado por las piernas", y que "bien se les cayó o lo arrojaron".

Según la coalición 'abertzale', la autopsia también revela diversos hematomas y golpes en zonas de su cuerpo que el médico forense que le atendió en Durango, done fue detenido, no apreció en ningún momento y que no fueron producidas por efecto de la caída, por lo que, a su juicio, "fueron realizados mientras estuvo en manos de la Policía Nacional".

HB también criticó que "continúen ejerciendo" los policías que custodiaban a Galparsoro en Indautxu y destacó que la Consejería de Interior del Gobierno vasco no diga nada, mientras que Corcuera ha dado por zanjado este tema. Asimismo, rechaza la sentencia que ayer absolvió a cinco guardias civiles acusados de tortras por haber prescrito el delito.