El nuevo parador supone creará unos 35 empleos directos, y su inauguración se enmarca “en una ambiciosa política de transformación del modelo turístico” de Castilla-La Mancha, como recordó el ministro. Esta comunidad autónoma ha recibido 158 euros de inversión turística, de los que 23 fueron para la provincia de Guadalajara, gracias al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR).

El parador, el número 98 de toda la red, está situado en un edificio de nueva planta y cuenta con 24 habitaciones, espacios gastronómicos, salones para eventos y una zona de ‘wellness’. En su construcción se invirtieron más de 22 millones de euros y el conjunto está ubicado frente al castillo de Molina, uno de los más grandes de España.

La obra artística principal que alberga el nuevo parador es una fotografía del artista Eduardo Nave, acompañada de piezas de otros creadores que transforman el recinto interior en una experiencia sensorial que combina tradición y vanguardia, según informó el Ministerio de Turismo en un comunicado.

Esta cartera lleva años contribuyendo a revitalizar el patrimonio histórico a través del Programa de Mejora de la Competitividad y de Dinamización del Patrimonio Histórico con uso turístico, que ha destinado 208,5 millones para la financiación de 92 proyectos en 13 comunidades autónomas.

Paradores terminó 2024 con un récord de ocupación de las últimas dos décadas, con una media del 74% anual y 1,5 millones de habitaciones ocupadas. Además, la compañía cerró el año con ingresos superiores a los 346 millones de euros y un beneficio neto de 40 millones lo que representa un incremento del 42% respecto al año anterior.

Para este año, también se espera la inauguración del Parador de Ibiza, con una inversión de 27 millones de euros. En los próximos años y de cara al centenario de la institución, que se celebrará en 2028, Paradores realizará una inversión de más de 250 millones de euros, junto con las actuaciones de Turespaña, para reformar parcialmente 22 Paradores.