Zapatero respondía así a las acusaciones y descalificaciones lanzadas por el presidente del Gobierno contra él durante el pasado fin de semana por entender que el PSOE está alentando una huelga política que perjudica a los intereses de España.

La dirección socialista aprobó ensu reunión de hoy una declaración política en la que se reafirma en su oposición frontal a la reforma del desempleo aprobada por el Gobierno el pasado viernes mediante decreto ley y defiende el "legítimo derecho" de las centrales sindicales a defender los derechos de los trabajadores.

El PSOE recuerda que no es convocante de la huelga y que sólo el Ejecutivo es responsable de su celebración, por la "cerrazón" que ha demostrado. Igualmente, reprocha a Aznar que, "lejos de comportarse como presidente detodos los españoles", se dedique a arremeter "contra todo aquél que le lleva la contraria".

Según Zapatero, la actitud de Aznar denuestra que el presidente "ha perdido la serenidad" y hace imputaciones "ridículas" contra el PSOE de tratar de recuperar en las calles lo que perdió en las urnas.

Esta actitud "autoritaria", que revela, a juicio del secretario general socialista, que el presidente "confunde los intereses de España y su imagen personal con los intereses y la imagen de España", sólo puee desembocar en un clima de "confrontación social" y "crispación" que será muy negativo.

En este sentido, el líder del PSOE "exhorta al Gobierno y especialmente a su presidente a respetar la dignidad intitucional de su función" y a "evitar descalificaciones e insultos", a la vez que le pide que se comporte como "el representante de todos los españoles y no como cabeza de una facción".

Por todo ello, Zapatero aununció que el PSOE emprenderá una campaña explicativa de la reforma aprobada por el Goberno y de su rechazo. Descartó, no obstante, que en esta tarea didáctica el PSOE pueda sumar sus esfuerzos a los de los sindicatos o a los de IU, que también tiene planes en este sentido. "La situación actual requiere un posicionamiento claro y propio" de cada una de las formaciones que rechazan la reforma, aseguró.

Por otro lado, el PSOE presentará en el Congreso una proposición no de ley en la que exigirá al Gobierno que comparezca para explicar su reforma y las razones por las que la ha decidido unlateralmente.

Pedirán también al Ejecutivo que recabe un informe del Consejo Económico y Social (CES) sobre la situación del mercado laboral en España y que dé cuenta de él en esa misma sesión parlamentaria. Este informe no es preceptivo, pero el CES es el único organismo en el que hay representación de todos los agentes sociales y de la administración.

El líder socialista consideró "absurdo" de Aznar que se tome la huelga general del 20 de junio como una "gran batalla" política y le recomendó qu retire su norma y retome el diálogo, porque si no rectifica habrá "crispación social y radicalización de las posiciones".

Los socialistas no descartan tampoco recurrir al Tribunal Constitucional, aunque esa decisión sólo se podrá tomar cuando el texto legal del Gobierno se tramité como ley en el Parlamento y salga publicada en el Boletín Oficial del Estado.