En un comunicado, la Iglesia extremeña recordó que el cura fue detenido el pasado 20 de febrero y que "esa misma tarde, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 2 de Don Benito decretaba su libertad provisional con medidas cautelares".

"Seguimos atentos al proceso judicial y dispuestos a colaborar con la Justicia en todo aquello que se nos requiera. Insistimos de nuevo en la prudencia y el respeto a las

personas implicadas que debe prevalecer sobre cualquier otra consideración", continuó el texto, en el que la Iglesia diocesana insistió en expresar su "dolor y consternación por el sufrimiento y escándalo que los hechos descritos y las circunstancias que lo rodean suponen".

"Durante todo este tiempo, se designará para la citada parroquia un administrador parroquial. Asimismo, se procurará al sacerdote el seguimiento y acompañamiento psicológico y espiritual pertinente", concluyó la diócesis.