Oñoro se manifestó en estos términos durante una de las mesas redondas del primer foro internacional organizado por Asett, el 'hub' de vanguardia de impulso nacional e internacional sobre economía social, ubicado en San Sebastián, promovido por el Ministerio de Trabajo y Economía Social y liderado por la Confederación Empresarial Española de la Economía Social (Cepes), en colaboración con el Gobierno vasco, el Consejo Superior de Cooperativas de Euskadi (CSCE), la Diputación Foral de Guipúzcoa y el Ayuntamiento de San Sebastián.

Para Oñoro, “pequeñas acciones de muchos multiplican” y es lo que en el Grupo Social ONCE “intentamos hacer cada día, ya que creemos en nuestro modelo y en esa manera de hacer distinta”. En su opinión, la forma de actuar del grupo “está calando” y lo que se debe hacer es “darte cuenta de que la estrategia del ‘win-win’ funciona y tener claro que solos se llega antes, pero juntos se llega más lejos”.

“Estamos generando un modelo empresarial rentable, inclusivo, humanista, innovador, inspirador, que aspira a ser referente. Queremos que la gente vea que se puede maximizar el beneficio maximizando también el impacto social y eso es lo que estamos intentando”, declaró a Servimedia Oñoro tras la mesa redonda en la que intervino.

En este sentido, indicó que se está intentando, mediante alianzas, que otros exporten el modelo empresarial, porque es “un proyecto válido y ganador” que funciona, recordando que ILUNION emplea ya a 43.000 personas. “La economía social, un proyecto de personas para personas como este, con un propósito como el de construir un mundo mejor con todos incluidos, es algo real”, remarcó.

CONFIANZA

Por su parte, el presidente de Mondragon, Pello Rodríguez, resaltó la importancia de trabajar en conjunto y de impulsar la confianza dentro de la economía social.

Tras él, el director general de Caja Popular Mexicana, Ricardo López, coincidió en esta idea y proclamó que “solos no podemos” avanzar tanto como se hace construyendo alianzas y apostando por la “confianza” entre las partes.

Igualmente, puso el foco en la importancia de las mujeres en la economía social, poniendo como ejemplo que en su país, en torno al 60% de las cooperativas están apoyadas por ellas. También animó a pensar cómo se puede sacar el máximo partido a las nuevas tecnologías y “a las nuevas maneras” de trabajar.

En una mesa posterior, el director de Prospektiker, Grupo LKS, Ibon Zugasti, auguró que “estamos en la primera etapa del ser humano” en la que con los avances tecnológicos se va a poder dar respuesta a desafíos que hasta ahora no se habían podido superar, como el cáncer. También apuntó a la inteligencia artificial (IA) como una de las herramientas que se deben emplear para que la sociedad “aprenda” nuevas formas de operar.

“LOS ODS, MUERTOS”

“Los objetivos de desarrollo sostenible ya están muertos. Solo queda un tercio del período y no vamos a llegar”, diagnosticó en alusión a la cercanía de 2030, tope para el cumplimiento de la hoja de ruta trazada, precisamente, en la Agenda 2030.

Por su parte, el investigador y exembajador de Chile, Héctor Casanueva, destacó que el sistema multilateral creado tras la II Guerra Mundial “ayudó mucho a expandir” el comercio mundial y se creó la Organización Mundial del Comercio (OMC). Por ello, alentó a que la economía social “reclame dentro de la OMC un lugar específico”, pues “el sector cooperativo” no lo tiene en estos momentos, por ejemplo, pese a que es un ámbito “muy intensivo en empleo”.

“Debe ir al sistema multilateral de comercio y decir que reclamamos nuestro espacio, que se cree un grupo de trabajo dentro de la OMC”, enfatizó Casanueva tras hacer hincapié en que todos los ámbitos de la economía deben poder “jugar con las mismas reglas”.

Finalmente, en representación del Ayuntamiento de San Sebastián, Kepa Korta, director de la Oficina Donostia Futura, alabó la capacidad de la economía social de “saber adaptarse a los cambios” y se cuestionó: ”¿Hasta qué punto la transformación digital es tan relevante en el mundo físico en el que vivimos?”. A su juicio, cabe preguntarse si “el mundo físico, lo que hacemos todos los días, se ha transformado tanto”. Además, advirtió del desafío que se vive en la actualidad de la gobernanza del mundo digital y previno de que la situación actual es “un fracaso” en esta materia.