En opinión del CES, la introducción de este visado temporal "resulta imprescindible dada la necesidad de un conocimiento previo entre el empleador y el trabajador inmigrante".

El visado propuesto por el CES tendría carácter temporal, de seis eses de duración, y serviría únicamente para la búsqueda de trabajo.

A juicio del CES, el hecho de que la solicitud de residencia para trabajar sólo pueda presentarse si el solicitante se encuentra en un Estado de forma legal "constituye una limitación que puede excluir la posibilidad de regularización de los inmigrantes que ahora se encuentran en situación irregular".

El CES cree que los requisitos para la renovación de los permisos de residencia y trabajo deben simplificarse al máximo, suprimiédose la restricción del permiso inicial a actividades o campos profesionales específicos o a regiones concretas.