JARRAI. LOS SINDICATOS POLICIALES ACUSAN AL GOBIERNO VASCO DE "COBARDIA" Y "DEBILIDAD" POR NO IMPEDIR LAS ALGARADAS CALLEJERAS

MADRID
SERVIMEDIA

Los sindicatos policiales SUP y ANPU coincidieron hoy en acusar al Gobierno vasco de "cobardía" y "debilidad" por no impedir las algaradas callejeras que protagonizan los jóvens de Jarrai en favor de ETA.

Los secretarios generales de ambos sindicatos, José Manuel Sánchez Fornet y Angel Martínez Sendino, declararon a Servimedia que los responsables de esta situación son los dirigentes del PNV, que han contribuido a crear un sentimiento nacionalista "muy fuerte y muy radical".

El líder del SUP acusó a la 'Ertzaintza' de no impedir las contramanifestaciones de HB, prohibidas por el Gobierno vasco, frente a los que piden la libertad de José María Aldaya, "por el complejo d entender que disolver una cosa ilegal es reprimir".

"Cuando hay una manifestación ilegal hay que impedir a toda costa que se concentren. O se impone el imperio de la ley o se impone el imperio de la algarada, que es el que está mandando" en el País vasco, señaló Fornet, que agregó que "lo que no es legal no se puede tolerar. Una manifestación ilegal hay que evitar que se celebre y hay que disolverla".

Por su parte, Martínez Sendino dijo a Servimedia que la Policía Autonóma Vasca "depende del PNV, que "hasta ayer, parece ser, estaba negociando con ETA" para solucionar el conflicto vasco. Según comentó, para esa negociación el PNV "tiene que permitir y tolerar que los abertzales puedan tomar la calle".

Martínez Sendino señaló que los jóvenes de Jarrai se están aprovechando de la crisis política que atraviesa el país y de las perspectivas de un futuro gobierno del PP, que defendería "a rajatabla" el cumplimiento íntegro de las penas para los presos etarras.

Por su parte, Sánchez Fornet dij que una solución al problema estaría en la reforma de la educación que se imparte a los jóvenes en los centros escolares vascos, donde, según dijo, algunos profesores presentan a España como un país opresor del pueblo vasco.

Agregó que "mientras se dé esa educación a los jóvenes, no es de extrañar que se sientan esclavos de una nación opresora" y actúen de forma violenta en la calle. A su juicio, el conflicto vasco "no tiene solución a corto plazo".

(SERVIMEDIA)
13 Dic 1995
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