La principal conclusión del estudio es que faltan camas en residencias para ancianos, lo que impide atender de forma adecuada la demanda. Además, en algunos centros privados los usuarios han de pagar más de 150.000 pesetas mensuales.

El informe de "Ciudadano" hace también varias recomendaciones que deben tenerse en cuenta antes de decidirse por una residencia u otra, entre ellas informarse bien de los precios y de la forma de facturar, exigir el reglamento de la residencia, sospechar de los horarios de visita restringidos y llamar a la Federación Nacional de Residencia Privadas de la Tercera Edad ante cualquier duda.

Por lo que se refiere a los horarios de visita excesivamente restrictivos, las organizaciones de consumidores y usarios consideran que ello puede suponer que la dirección del centro no desea que se vea cómo funciona la residencia en cualquier momento.

A juicio de los autores del estudio, "la falta de plazas es cada día más acuciante, ya que si actualmente la población española mayor de 65 años representa un 14 por ciento del total, para el año 2000 se elevará al 17 por ciento".

El informe recuerda que la Organización Mundial de la Salud recomienda la existencia de cinco camas residenciales por cada cien ancinos. En Europa la proporción se ha establecido en cuatro plazas y el Plan Gerontológico Nacional establece que para el año 2000 debería haber en España 3,5 camas por cada cien habitantes mayores de 65 años.

"A sólo cuatro años de esta fecha en España no se cumple ninguna de estas recomendaciones, ya que la cobertura actual es de tres camas por cada cien ancianos, cobertura que además no es uniforme", agregan las organizaciones de consumidores.

Por otra parte, según datos de la Federación Nacionalde Residencias Privadas de la Tercera Edad incluidos en el estudio, actualmente existen en España más de 400 centros 'piratas', que representan unas 15.000 camas y que no cumplen la normativa vigente, suelen tener personal insuficiente e instalaciones viejas, entre otras carencias. Un síntoma de ilegalidad es que los precios de las residencias 'piratas' suelen ser demasiado bajos.