Miguel Castells, abogado de la acusación particular, informó hoy a la sala que ayer acudió al Triunal de Apelación de Pau (Francia) y tuvo acceso a una carta remitida por el ministro de Justicia francés a su homólogo español, en la que se negaba a citar a los encarcelados, "por el riesgo inherente al traslado en grupo de estas personas".

Según explicó Castells, este detalle es sumamente importante, ya que al no haber comparecido los testigos al juicio oral, las declaraciones sumariales carecen de valor legal.

Sin embargo, de ser admitida esta prueba, en la que se demuestra la imposibilidad d los testigos de personarse en la sala, el tribunal consideraría como válidas las declaraciones prestadas anteriormente por los mercenarios, con lo que se convertirían en testigos de cargo.

El letrado añadió que entre estos testigos que no llegaron a ser citados figuran Figueiredo Fontes, Roger Roussey, Alain Lambert y Mohmad Talbi (todos ellos inculparon a Amedo y Domínguez), aunque la lista era más amplia, pero sólo recordaba esos nombres con seguridad.

Precisó que entre ellos no se encontraba in embargo Christian Hittier, reclutador de mercenarios, al que sí se citó, ya que se encuentra en libertad provisional, pero se negó a acudir.

Castells acudió a Francia para agilizar las diligencias solicitadas por el tribunal del caso, con el fin de poder incluir en actas la declaración testifical y la sentencia del mercenario Figueiredo Fontes, que fue procesado el pasado mes de junio en Pau.

PRUEBAS DOCUMENTALES

Por otra parte, hoy continuó la lectura de las pruebas documentales, en las quese dio cuenta de los testimonios de varios de los sicarios contratados por los GAL.

El secretario leyó declaraciones policiales y judiciales de Patrick Pironneau (que colaboró con Hittier y Labade reclutando mercenarios), Odette Roussey (hermana de Roger, mercenario de los GAL), Marie Jeanne Cassiede y Lucien Mattey (procesado por el atentado al "Mon Bar", que se negó a responder a ninguna pregunta).

Los tres primeros reconocieron fotográficamente a Amedo y Domínguez como los policías españoles qe se encargaban de organizar las acciones de los GAL.

Además, se dio cuenta de los testimonios prestados por Figueiredo Fontes, Ferreira Cisneros, Carvalho Da Silva y Correira da Cunha, que participaron en los atentados de los bares "Batzoki" y "La Consolation", aunque sólo el primero reconoció a los procesados como las personas que le contrataron.

Esta tarde continuará en la Audiencia Nacional la lectura de las pruebas documentales.