La portavoz de Sanidad del Grupo Socialista, Matilde Valentín, denunció la falta de iniciativa del Gobierno, especialmente del Ministerio de Sanidad, y abogó, en consecuencia, porque sea el Congreso quien tome las riendas.

Así, la iniciativa propone la aprobación de un plan coordiado con las comunidades autónomas para inspeccionar de forma inmediata todas estas instalaciones, y de una norma básica de control y prevención que contenga los requisitos mínimos que han de cumplir estas instalaciones.

Además, proponen que el Instituto de Salud Carlos III, a través de los centros nacionales de Epidemiología y de Microbiología, preste apoyo científico y técnico para investigar y resolver los brotes actuales, aprovechando sus conocimientos para prevenir otros futuros.

La iniciativ pide al Gobeirno que cumpla con sus competencias, tanto normativas como de coordinación de la política sanitaria a través del Consejo Interterritorial y el apoyo del Instituto de Salud Carlos III.

Valentín recordó que la registrada en Murcia es la epidemia de legionella más importante producida jamás en ningún país de nuestro entorno, ya que ha afectado a más de seiscientas personas en apenas unos días.

Este brote, unido a otros anteriores, convierte a España en el país desarrollado con más brots de legionella, mientras toda la política del Ministerio de Sanidad "ha sido la de esconderse tras la cantinela de que las competencias en esta materia están transferidas a las comunidades autónomas", dice la iniciativa.