El joven, que solía actuar acompañado de otras personas, fue detenido "in fraganti" en un cajero automático cuando realizaba reintegros con una tarjeta sustraída minutos antes.

Sergei . y sus compinches escogían siempre cajeros automáticos situados en el exterior de entidades bancarias, para evitar ser captados por la cámara de seguridad, y sus víctimas eran personas de edad avanzada o mujeres.

Tras colocarse detrás de la víctima mientras ésta realizaba alguna operación en el cajero, observaban el número secreto que marcaban y a continuación lanzaban al suelo un billete de cinco o diez euros para distraer la atención del usuario.

En ese momento, uno de los miembros de la bandaaprovechaba la distracción de la víctima para robar la tarjeta, con la que realizaban extracciones por el importe máximo permitido por día. Tras recibirse varias denuncias, la policía estableció un dispositivo de vigilancia que dio como fruto la detención de Sergei I., mientras sus compinches siguen siendo buscados.

Al detenido, que cuenta con cinco antecedentes policiales por hechos similares, se le ha incoado expediente de expulsión por residir en España de forma ilegal.