Según afirmó hoy en el transcurso de la inauguración de un tramo del distribuidor norte de la autovía M-40, podría acordarse que la línea 10 de Metro vaya bajo tierra, "excepto el puente sobre el Manzanares".

La diferencia entre Ayuntamieto y Comunidad estriba en que el primero desea que el suburbano transite enterrado por la Casa de Campo, opción que defiende la concejala de Medio Ambiente, Esperanza Aguirre, mientras que el consejero de Transportes, Julián Revenga, estima que esa alternativa es cara y de dudosa viabilidad técnica y que es mejor hacer pasar el Metro sobre un viaducto que atraviese el río y el parque.

Ambas instituciones se han dado de plazo hasta fin del presente año para llegar a una solución y tanto Leguina como Alarez del Manzano manifestaron hoy su deseo de alcanzarla.

El alcalde señaló al respecto que "los problemas técnicos son más difíciles de lo que desearía", ya que el Metro debería salvar una pendiente. Por su parte, Leguina apremió y dijo que "tenemos que tomar una decisión".